JOTA TUMBA AL TENERIFE (3-1)

El Tenerife se empeña en demostrar que, cuando piensas que has tocado fondo, puedes seguir hundiéndote.

Celta B: Queco Piña; Víctor Díaz, Víctor Vázquez, Raúl, Jony; Levy (Capó, 80′); Jordan (Manteca, 84′), Borja Valle (Maceira, 76′), Pablo Pillado; Jota; y Eric.

CD Tenerife: Aragoneses; Cristóbal, David Medina, Ayoze Placeres (Abel, 60′), Raúl Llorente; Marcos Rodríguez; Kike López (Rubén Rosquete, 20’), Víctor Bravo, Luismi Loro, Ferrán Tacón (Kiko Ratón, 54′); y Perona.

Pocos partidos se le pondrán tan de cara al CD Tenerife como el de esta mañana en el Municipal de Barreiro. El partido comenzó con dominio local y ya  en el primer minuto Aragoneses tuvo que emplearse a fondo tras un disparo desde lejos de Pablo Pillado. El cuadro insular todavía estaba intentando zafarse del dominio de los celestes cuando en el minuto 7, el jugador local Eric fue expulsado por agredir a Raúl Llorente. Acto seguido el CD Tenerife inauguraba el marcador tras un centro desde la izquierda de Ferrán Tacón que Víctor Vázquez, sin querer, introducía en propia puerta tras intentar despejar. Con un jugador más y ventaja en el electrónico los chicharreros mantenían la posesión y llegaban continuamente a área rival, pero sin demasiado peligro. Los locales se limitaban a salir a la contra y a las individualidades de Jota, jugador al que la Segunda División B se le queda pequeña. El conjunto dirigido por García Tébar comenzó a apagarse poco a poco y a perder intensidad, esto lo aprovechó el filial vigués para ir ganando metros y gozar de algunas ocasiones. Así, en el minuto 33, Jota empató el partido, aprovechó el rechace de una falta lanzada por Borja Valle que el portero visitante no logró atajar de forma segura. Sólo cuatro minutos después y sin haberse recuperado del golpe que supuso el empate los canarios recibieron el segundo mazazo. Otra vez Jota en diagonal desde la izquierda y tras dejar atrás a Cristóbal se plantaba ante Sergio Aragoneses para no perdonar en el mano a mano. El cuadro preparado por Pichi Lucas comenzó incluso a gustarse con jugadas y combinaciones precisas y bonitas de cara al espectador. El conjunto foráneo necesitaba el descanso, se tambaleaban ante una situación surrealista, el penúltimo clasificado había volteado el marcador con un futbolista menos y lo que es peor, el fútbol ramplón ofrecido por los canarios no invitaba al optimismo.

Tras la reanudación el equipo visitante lo intentaba pero sin peligro, mostrando graves carencias futbolísticas. En el minuto 51, nuevamente Jota, recogía el esférico en su área y no lo soltaría hasta depositarlo dentro de la portería defendida por Aragoneses. Un golazo. El jugador del Celta demostró ser uno de los jugadores referencia de la categoría y poseedor de una calidad superior deshaciéndose de los rivales que se le salían al paso. El cuadro local seguía manejando los tiempos del partido y se veía más cerca un posible 4-1 que el 3-2. A medida que pasaban los minutos los gallegos se dedicaron a mantener el resultado. Los chicharreros tuvieron algunas ocasiones gracias a un achuchón final, como siempre, demasiado tarde. Pudieron recortar distancias a través de Rubén Rosquete tras un mano a mano con Queco Piña que envió fuera. Luismi Loro también tuvo una oportunidad tras estrellar un zurdazo desde la frontal en el palo izquierdo de la puerta de Piña. Para redondear la mañana, Kiko Ratón fue expulsado en el minuto 77 por doble amonestación. Poco más ocurrió hasta el pitido final del partido.

Con esta victoria el Celta B asciende una posición y queda decimoctavo con 34 puntos, a dos del CD Toledo, que en estos momentos marca la salvación.

El CD Tenerife por su parte sigue tercero con 57 puntos. Tras esta derrota se da por hecho que Andrés García Tébar será cesado. Suena como sustituto Quique Medina, actual preparador del filial tinerfeño. También está en la cuerda floja el director deportivo de la entidad insular, Pedro Cordero. Desde fuera puede parecer exagerada y errónea esta situación, ya que el equipo está tercero, cumpliendo con el objetivo de entrar en posiciones de playoff. Y quizás sea errónea, pero no exagerada, el equipo no puede mantener esta dinámica. Un equipo histórico y que representa a una isla con profunda tradición futbolera no puede dar esta imagen, no puede pasearse por campos de España con la sensación de pasotismo, de debilidad, incluso de falta de compromiso que venimos viendo desde hace algunas fechas. Se puede ganar o perder, es parte del juego, pero el cómo es muy importante. Y ya hace un tiempo que se ha hecho palpable un grave problema de actitud (esto, por supuesto, es opinión). Y este aspecto es innegociable para la afición tinerfeña, afición que domingo tras domingo acude al Heliodoro Rodríguez López a apoyar a su equipo, con entradas propias de encuentros de Primera División. Porque así es esta hinchada, de Primera División, aunque se encuentre anclada a un equipo de Segunda B. Y se le está faltando al respeto desde todos los estamentos del club, que a veces olvidan que el principal activo del CD Tenerife SAD son ellos, sus aficionados y que a ellos se deben.


Por Juan Manuel Santos Torres
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